martes, febrero 20, 2007

La monja


¡Qué delicia pronunciar esa palabra de madre que no he proferido desde hace treinta años!. La vieja que lleva el traje de los muertos porque nunca ha vivido la vida, dulce como la resignación, nos enseña a sonreir a los sufrimientos como si fueran alegrías, porque ella conoce los beneficios del dolor.

August Strindberg. Infierno

1 comentario:

Anónimo dijo...

a chuparla

Bitácora anarquista de literatura, desfases, opiniones, anecdotarios, y demás adentros que se echen afuera. El Perro apoya al pueblo en cualquier acción de respuesta que por justicia ejerza. Que explote la bomba.