lunes, febrero 14, 2005

Entrevista al inventor de la rueda I

Pregunta: Es usted el inventor de la rueda, patentó su invento y en pocos años se ha convertido en el hombre más rico del mundo. Mi pregunta es, ¿cómo dio con tan revolucionario invento?, ¿cuánto tiempo le llevó construirlo?.

Respuesta: Gracias y sí, si soy rico, todo hay que decirlo. En cuanto al esfuerzo que tuve que hacer para inventar la rueda fue sólo el esfuerzo que constituye la observación del universo. Me di cuenta desde pequeño que había cosas redondas: planetas, yemas de los huevos, las oes, los frutos, piedras y precisamente, estando yo un día tumbado bajo un naranjo en una pendiente, vi como caía una naranja del árbol y cómo esta rodó por la pendiente y ¡zas!, me dije, ¡la rueda!. Enseguida fui a casa, le quité los cubos al coche y puse en sus ejes unas ruedas rudimentarias que hice con madera y ¡qué cambio oiga!, el coche no subía y bajaba constantemente al andar sino que se deslizaba sobre la calzada, pues como usted sabe, la rueda no tiene aristas. En fin, la verdad, es que no sé como nadie se percató de la existencia ya en la naturaleza de la rueda y construyera un artefacto similar para el disfrute del hombre, … Fíjese lo que le digo, yo sólo desentrañé el universo, y es que pienso que todo está inventado por la naturaleza y sólo hay que humanizar lo que ya hay.

P: Bien. Otra cuestión. Su invento ha trascendido como sabe a otros ámbitos más allá de su uso para el trasporte, estoy hablando de la rueda de reconocimiento de la policía. Práctica ésta, que organizaciones de derechos humanos aborrecen y que en cierta medida le responsabilizan a usted como creador de la rueda.

R: Sí, es cierto… Pero, tenga usted en cuenta que la rueda es, es, ¿cómo diríamos?, …, inocua, sí, inocua, no tiene sabor, no tiene maldad en sí misma, y claro, el uso pernicioso para la humanidad que se pueda hacer con ella, pues oiga usted, es responsabilidad de quien haga ese mal uso. Repito, yo sólo saqué a la luz lo que ya estaba en la naturaleza. A mi favor también se podría decir que los dados, deporte universal muy relacionado con las apuestas, están siendo desbancados por el fútbol, el tenis, etcétera, deportes que a raíz del invento de la rueda y por ende, de la pelota, están en auge, y que son fuente de salud para los jóvenes. Y le digo más, que yo sepa, la expresión que está en la calle para explicar que algo ha salido bien es “ha salido redondo”, ¿o no?; y es que sólo se echan en cara las cosas malas, oiga.

P: Yo sólo le hago las preguntas que considero que la gente le haría, de verdad que personalmente le admiro y no le echaría en cara el asunto del uso policial de su invento.

R: Se lo agradezco.

P: Ni el de las ruedas de reconocimiento ni tampoco lo de las pelotas de goma usadas como armas para desmontar manifestaciones ilegales, que por cierto el otro día le costó un ojo a un joven. Aunque reconozco que es menos dañino que los cubos de goma, que si impactaban por la superficie plana bien, pero las aristas…

R: Vaya que sí.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Dales caña Croquis

Anónimo dijo...

Apunte curioso:

La rueda, sí, sí, no es broma, la rueda fue legalizada por los curas budistas de Katmandou, a su pesar, en los años cincuenta del siglo veinte.

Su utilización suponía la pena de muerte que era aplicada por los sicarios legales de esta teocracia.

Desgraciadamente, los comunistas chinos, (Más conocidos por su antropofagia infantil), acabaron imponiendo por la fuerza, antidemocráticamente, su uso a estos simpáticos curas bonzos sin que la población, extrañamente, se opusiera a tal atrocidad pagana.

Claro que para la empresa de la monarquía Vaticana estos son unos aficionados. Comprobadlo.

Hay, Dalay, cómo te reprimieron esos rojos canallas.

Bitácora anarquista de literatura, desfases, opiniones, anecdotarios, y demás adentros que se echen afuera. El Perro apoya al pueblo en cualquier acción de respuesta que por justicia ejerza. Que explote la bomba.